Blog

  • Inicio
Brown and Beige Aesthetic Review Instagram Post
¡Me emociona y llena de gratitud leer la maravillosa reseña de mi novela «EL PULSO DE MI SANGRE» escrita por el escritor cubano Enmanuel Castells! Saber que mi primera novela, tantos años después, ha tocado corazones de esa manera es un regalo inmenso para cualquier autora.
Enmanuel Castells ha capturado la esencia de la historia con una sinceridad y sensibilidad conmovedoras. Cada palabra compartida refleja la profundidad de la trama y su significado. Le agradezco que se haya tomado el tiempo para explorar mi obra y compartir sus pensamientos. Agradecimiento extensible a Mira Editores que se atrevió a publicarla.
Espero que esta novela continúe llegando a más lectores y siga inspirando emociones y reflexiones. El apoyo de los lectores es impagable
Por Enmanuel Castells Carrión
Hace poco terminé de leer la que resulta ser la primera novela de Elena Laseca Ferrández: «EL PULSO DE MI SANGRE». Si bien es un libro publicado en el año 2016 por Mira Editores, hoy quiero reseñarla porque un buen libro nunca está fuera de tiempo para encontrar nuevos lectores que, como a mí, me atrapó y me mantuvo atenazado a sus 350 páginas desde la primera línea hasta ese final épico, con un grito revelador, a todas luces inspirando nueva dosis de esperanza en la malograda ruta de su personaje principal.
Si a uno como lector, le refieren que una niña nacida en cuna de oro, en las intrincadas tierras de un pueblo de campo, criada bajo los rigores de una educación perfecta y contando con un mar de amores que le asisten desde su nacimiento, termina rayando la pobreza, al frente de cinco hijos, sola, sufriendo una tragedia tras otra…lo mínimo que nos puede inquietar es saber cuáles fueron los móviles que desembocaron en ese desfortunio que pinta dolorosamente profundo y desgarrador.
Elena Laseca, con un poder imaginativo de relevante impresión, logra en primera instancia, trasladarnos a los finales de la España del siglo XIX y el narrador que escoge se posesiona en un lenguaje tan acertado de época, que nos bastará la cadencia expresiva de sus personajes para realizar esa muda temporal que nos reubica y nos mete de a lleno en situación. El cuadro familiar es descrito con perfiles de personajes tal y como nos lo ha legado la historia a través del tiempo: una tía rígida y solterona, un padre abnegado, de ética vertical y carácter recto, una esposa respetuosa y discreta, una amiga de la niña, de clase social humilde pero a la postre un personaje rico en matices, cuasi voz populi, cuyo desparpajo expresivo es una clase magistral de las declinaciones y variaciones que tiene el castellano, según la región dentro de la península ibérica.
Dando por sentado que esta premisa está lograda a todas luces, uno va descubriendo que EL PULSO DE MI SANGRE es una novela a la cual la signa, sobre todas las cosas, el amor. Pero su autora tiene la sagaz inteligencia de lograr que su obra no peque de novela rosa. Si la desarmáramos en piezas, parecería un legítimo melodrama, pero aquí aparece otra cualidad: Elena no se viste de Filóloga para resolver este lugar común tan viciado en la literatura; elige a cambio, exorcizar potencialmente un complemento demasiado arraigado a su personalidad y recurre al uso de la memoria, al evocativo de su alma y al territorio de la poesía para dejarse la vida en cada línea.
Sin dudas, uno va descubriendo una novela visceral, la cubre de punta a cabo un aliento poético de extraordinaria capa fina, urgida en el lirismo del drama que encierra en sí misma. Hace (quiero decir: logra) que el corazón del lector se sacuda en giros bruscos que a momentos van del llanto a la risa o te detiene en la conmoción que suele crear el silencio más meditativo frente a los enigmas de la existencia humana; una historia donde pesa mucho el dolor, pero desprende luz e irradia esperanza, tal y como le toca a la vida desde sus orígenes.
Estructurada solamente en dos partes, la primera arranca con el nacimiento de su personaje principal (Beatriz) y la otra abre telón cuando ya han pasado veinte años, dejando atrás al siglo XIX y asomando los albores del XX. La novela alcanza mayor fuerza dramática en la segunda parte. Los personajes de la primera parte han crecido y envejecido, y los retoños van creciendo y tejiendo cada uno subtramas que enganchan de manera irresistible, vinculados todos al cordón umbilical que sigue siendo el personaje de Beatriz. Se vuelve muy visual, cual buena película, descriptiva, particionando elementos muy gráficos del que uno se siente participe, la historia tensa muchos acontecimientos, uno detrás del otro que impiden detener la lectura. Sobrepasadas 200 páginas, a esa altura la autora va cerrando y abriendo nudos que nos ponen al borde de la asfixia, muertes inesperadas nos quitan el aliento, y todo ello, sin caer en ningún desliz banal ni comercial. Tiene ese don de retratar el bregar y el espíritu íntimo del hogar español donde todas las mujeres parecen lorquianas, desmesuradamente sufridas, a sabiendas que ningún sueño viene envuelto en papel de celofán, pero esta hermosa novela tiene, sobre todas las cosas, el destello luminoso que siempre prende aquello que no se puede perder bajo ningún desgarro: la esperanza.
Por eso es una excelente obra, por su conmoción y sus emociones, por lo humano de su verdad, por lo mucho que se parece a nosotros y por lo que nos enseña sobre la capacidad de luchar a toda costa, un libro que a pesar de su salida hace un lustro y tanto, recomiendo a todo el mundo, porque como siempre sucede con la magia, la poesía, el hechizo y los enigmas, cada lector descubrirá la novela que su alma decrete como apropiación irrevocable dentro del patrimonio sagrado de sus más profundos sentimientos. No olviden que este es un drama que termina con un grito de luz.
Gracias Elena por este hermoso canto a la vida.
«El pulso de mi sangre», sigue disponible en vuestras librerías de referencia, en todas las plataformas digitales (Amazon, TodoLibros, Fnac, La Casa del Libro, …) y en https://www.miraeditores.com/El-pulso-de-mi-sangre.libro

Deja una respuesta