El pasado 30 de julio tuvo lugar el primer Encuentro Literario del Club de Lectura de Pozalmuro, la tierra de mi padre, y tuve la inmensa fortuna de ser la primera autora invitada.
Fue una gran tarde. Llena de emociones. Descubriendo parte de las raíces propias. Volviendo a saborear cómo los lectores hacen suyas tus novelas y te muestran otras miradas, otras historias, dentro de tu propio libro. En este caso con «El pulso de mi sangre» cuya primera parte transcurre en una especie de «alter ego» geográfico, El Pozo del Moro. Con
Iniciativas como la del Club de Lectura impulsado por la Asociación Cultural La Lastra devuelven vida al territorio, aunque sea de forma estacional. Creo que es imposible sentirse más a gusto de lo que hicieron que me sintiera.